jueves, 31 de diciembre de 2015

Respuesta a un poeta (Benjamín Prado)

Vacía las palabras,
haz que callen,
límpialas de ellas mismas para contar tu historia.
Lo que buscas existe dentro de lo que encuentras,
como oro está en sombrío
arco está en corazón.
Cuida que lo que dices no sea como el vaho
del que empaña un cristal
para escribir su nombre sobre un mundo vacío.
Procura que el silencio se lea en tus poemas,
pero jamás olvides
saber qué está del lado de la llave,
qué está del lado de la cerradura.
Cava el pozo de lo que nadie ha dicho
y persigue el rumor de las cosas sin nombre.
Pero recuerda siempre esta verdad:
las tormentas de arena
sólo son el desierto que avanza hacia el desierto.
Vacía las palabras,
qué más puedo decirte.
No desprecies la luz ni desprecies lo oscuro.
Vacía las palabras como quien drena un lago.
Iceberg, 2002.

jueves, 24 de diciembre de 2015

El día se ha ido (Ángel González)

Ahora andará por otras tierras, 
llevando lejos luces y esperanzas, 
aventando bandadas de pájaros remotos, 
y rumores, y voces, y campanas, 
-ruidoso perro que menea la cola 
y ladra ante las puertas entornadas.

(Entretanto, la noche, como un gato 
sigiloso, entró por la ventana, 
vio unos restos de luz pálida y fría, y
se bebió la última taza.)

Sí; 
definitivamente el día se ha ido. 
Mucho no se llevó (no trajo nada); 
sólo un poco de tiempo entre los dientes, 
un menguado rebaño de luces fatigadas. 
Tampoco lo lloréis.  Puntual e inquieto, 
sin duda alguna, volverá mañana. 
Ahuyentará a ese gato negro. 
Ladrará hasta sacarme de la cama.

Pero no será igual. Será otro día.
Será otro perro de la misma raza.

Prosemas o menos (1985)

jueves, 17 de diciembre de 2015

Conversar con los árboles (Carlos Pujol)

Conversar con los árboles
termina siendo una necesidad
para saber un poco más del hombre.
Cuando murmuran sus palabras rotas
deshechas en el viento,
aunque su lengua vegetal encierre
más secreto que comunicación,
hay que prestar oídos.
Y hablarles quedamente en español,
en el parque cuando la luz se va
con la sobria elegancia
de un lento y desdeñoso atardecer.


Versos de Suabia (2005)

jueves, 10 de diciembre de 2015

Desafío a la vejez (Gioconda Belli)


Cuando yo llegue a vieja
-si es que llego-
y me mire al espejo
y me cuente las arrugas
como una delicada orografía
de distendida piel.
Cuando pueda contar las marcas
que han dejado las lágrimas
y las preocupaciones,
y ya mi cuerpo responda despacio
a mis deseos,
cuando vea mi vida envuelta
en venas azules,
en profundas ojeras,
y suelte blanca mi cabellera
para dormirme temprano
-como corresponde-
cuando vengan mis nietos
a sentarse sobre mis rodillas
enmohecidas por el paso de muchos inviernos,
sé que todavía mi corazón
estará -rebelde- tictaqueando
y las dudas y los anchos horizontes
también saludarán
mis mañanas.



jueves, 3 de diciembre de 2015

Así me iré afirmando (José Luis Hidalgo)

Bajo la inmensa noche soy un inmenso SÍ.
Soy un inmenso SÍ  que confirma su vida,
un SÍ que palpita o afirmación rotunda
de que soy, de que existo y moro sobre la tierra.
Bajo la negra noche, bajo el cielo profundo,
bajo el cuerno azulenco erizado de estrellas
me siento transcurrir como un solo latido
que estremece en el aire su coraza temblante.
 
Yo llevo aquí la vida.
 
Esta vida que encierra como una mano el mundo,
la vida o subterránea corriente de clamores
que baja hacia la tierra como serpiente viva
o se eleva cantando de amor hacia la luna.
¿No la sentís?
Es la savia del mundo que pasa por mi cuerpo,
la corriente que gira, cegor inagotable,
voz de retorno eterno por un mismo camino.
 
SÍ, SÍ, siento que me confirmo
porque soy para el mundo causa de su presencia.


¨Raíz¨(1944)